Hitchcock, Alfred Hitchcock es, guste o no, uno de los mejores directores de cine del siglo XX.
Un realizador que tiene el título de “Maestro del suspense”, por las maravillosas películas que tiene sobre ese tipo de cine.
Lógicamente, no todas son redondas, pero sí que tiene unas cuantas que han quedado en nuestra memoria cinematográfica. A mí, personalmente me gustan mucho sus películas británicas y dos de sus películas americanas, “Rebecca” y “Con la muerte en los talones”.
Ahora se estrena en los cines el documental “Mi nombre es Alfred Hitchcock” dirigida por Marc Cousins.
Un documental que tendría que ser de obligado visionado en las escuelas de cine, cómo también tendría que ser la lectura del libro de François Truffaut “El cine según Hitchcock”, con la voz del propio director explicando cómo empezó su trabajo en el cine, en el cine mudo cuando era diseñador de los títulos de interludio y su evolución en sus películas, explicando por qué cada plano de sus películas.
Un documental con aire de máquina del tiempo, con sensación de sorpresa o invención y espontaneidad, que podría ser el futuro del género documental. Un trabajo para los que son amantes del director británico o para los que tengan curiosidad por él.
Este trabajo, con guion del propio Hitchcock, arroja una nueva luz en las escenas míticas de sus películas, que te hace ver al Alfred Hitchcock persona.
Cousins tiene un ojo notable para revelar los detalles reveladores de todas, ya que salen todas, las películas del maestro, desde la primera en 1922 (Number 13) hasta la última en 1976 (La trama).
Una propuesta fresca de cine, para lo que queda de verano.
Un documental que vale la pena ver en la gran pantalla de un cine.