EL SOCIEGO QUE NECESITO
Si te soy honesto, ahora mismo me apetece tumbarme y poner música de fondo, cerrar los ojos y simplemente dejarme invadir por las buenas vibraciones.
Quiero disfrutar de la tranquilidad y el bienestar que me genera, sosegar mi ajetreado cerebro, desconectarlo del mundo y sus cosas por un ratito.
La música me hace sonreír, me transporta y me devuelve a lugares y momentos de mi vida, me recarga y me da alegría.
Mis endorfinas corren libres por mi cuerpo, creando un puñado de sensaciones maravillosas a lo largo y ancho de mi tórax. Solo de pensarlo ya siento como poco a poco me voy relajando.
Aun así, ¿sabes que sería infinitamente mejor todavía?
Que decidieras venir conmigo y te tumbases a mi lado un ratito para que pueda compartir esta gran pasión contigo. No necesito que hagas nada en especial, simplemente quédate, quédate a mi lado y disfruta de la tranquilidad.
Al ratito lo mismo me arrullo un poco a tu lado, quiero notar un poco ese calor tan sincero que desprendes, pegar la oreja a tu torso y sentir los latidos de tu corazón al ritmo de la música.
Necesito un oasis en medio de este caos, a falta de dinero para un viaje, quiero crear mi pequeño rincón en el que descansar mis huesos.
¿Me acompañas?