HACERSE VALER POR EL TALENTO
El director Borja de la Vega, que ya nos sorprendió en el 2021 con su película “Mía y Moi”, realiza ahora una versión libre de las últimas horas de la actriz Sandra Mozarowsky, a la que le da vida una mágnifica Claudia Traisac en la película “La última noche de Sandra M.”
Un largometraje de escasos 80 minutos en un proyecto humilde, pequeño, con una puesta en escena sólida, un nivel técnico digno y con una voz propia, donde denuncia el patriarcado apuntando a los abusos que se cometieron en la época del destape del cine español.
El film se presentó en el pasado festival de cine de Sitges, que nos lleva al verdadero mundo del horror, aquel que sufren las mujeres en los sets de rodaje por parte de los directores y productores.
Eran otros tiempos, pero los poderosos siguen haciendo de las suyas también hoy en día, a pesar del “Me Too” y que por suerte están saliendo a la luz, para frenar sus malas praxis.
Vamos a descubrir a la actriz Sandra Mozarowsky, para los más jóvenes, una joven promesa de la interpretación que falleció a los 18 años de edad, tras precipitarse desde el balcón de su casa.
La versión oficial dice que fue suicidio; la versión que corre por el pueblo es el de asesinato, ya que la autopsia desveló que estaba embarazada.
Con este panorama, los rumores corrieron cómo la pólvora, diciendo que el hijo era de alguien muy poderoso de aquella época y que, por no querer abortar, se la quitaron de en medio.
La filmografía de Sandra Mozarowsky es amplia desde que debutó en el cine con 11 años en la película de Pedro Lazaga “El otro árbol de Guernica” (1969). Cuatro años hubo que esperar, para que con quince años apareciera en la película de Vicente Escrivá “Lo verde empieza en los Pirineos” (1973) y en la comedia de Mariano Ozores “Manolo la nuit” del mismo año.
Tras dos películas más en el año 1974 “Los ojos azules de la muñeca rota” y “El mariscal del infierno”, el año 1975 es su gran año, ya que aparece en seis largometrajes, donde destaca su papel de Lucy en la película “Las noches de las gaviotas” de Armando de Ossorio y su participación en “Cuentos y Leyendas” de TVE.
Un año más tarde, participa en cuatro películas más y curiosamente en una de ellas comparte cartel con Bárbara Rey (que ahora está otra vez en boga por los comentarios de su hijo y su relación con el Rey Emérito), aunque la verdadera protagonista de la película “Call Girl: la vida privada de una señorita bien” de Eugenio Martín, es Teresa Rabal.
En 1977 vuelve a aparecer en TVE en un capítulo de la serie “Curro Jiménez” y en cinco largometrajes más, uno de ellos con un título muy curioso y dirigido por Gil Carretero… “Abortar en Londres”.
Su último trabajo es con Tulio Demicheli interpretando a Cristina, una de las protagonistas de la película “Ángel negro”.
Sólo por ver la gran interpretación de la actriz Claudia Traisac en esta película, vale la pena haber pagado la entrada del cine.
Un servidor no entiende cómo Claudia Traisac no haya logrado nominación en los premios Goya, Gaudí, Forqué o Feroz, con el gran trabajo que realiza en La última noche de Sandra M.