Intromisión de la tecnología en el amor
El acto de estar mirando el celular delante de la pareja es algo tan cotidiano como peligroso para el futuro del vínculo.
En Australia lo bautizaron en el 2012 phubbing, que mezcla phone y snubbing (ignorar/menospreciar).
Los especialistas afirman que conduce a trastornos de depresión y ansiedad, provocando conflictos y hace caer el vínculo a los niveles más bajos de satisfacción.
El SmartPhone puede ser un factor determinante en la ruptura amorosa, ya que una parte siente que no le importa al otro.
El no sentirse priorizado hace crecer un sentimiento de inseguridad que vuelve a la relación insalubre.
Más de la mitad de las parejas discuten debido a problemas originados por el uso excesivo del móvil. Separan más que conectan, si son mal usados generan resentimientos y disminución del afecto.
Los mismos dispositivos que colaboran con las parejas para reafirmar y acercar su amor cuando están separados causan disputas cuando se utilizan en presencia del otro de manera irresponsable.
Cuidar la vida digital y no descuidar a la pareja en el mundo físico sería la clave para no crear una barrera que podría llevar a la desconexión emocional.
¿Cómo determinar si se es phubber?
● Obsesión con el teléfono
● Ignorar a la pareja
● Revisar el teléfono en momentos íntimos
● Respuestas cortas y desinteresadas por estar absorto en el móvil
● Uso excesivo del smartphone en la cama
● Desconexión en actividades compartidas por dar más atención al móvil al ver una película o en un paseo
Para mantener la buena sintonía amorosa y escapar del phubbing hay tres factores importantes:
1.— Introspección, pensar el porqué se recurre al celular en presencia del otro
2.— Mutualidad, el reconocimiento que las necesidades de quien nos ama son tan importantes como las propias
3.— Regulación de las emociones, evitar el uso del smartphone como escape.
Un bar en Brasil creó el “vaso offline” que obliga a los clientes a utilizar el dispositivo como posavasos del trago que sirven.
Estrategias de solución
● Límites de tiempo y lugar de uso
● Enfoque consciente con compromiso de practicar la atención plena cuando están juntos
● Crear “zonas libres de dispositivos”, prohibirlos en el dormitorio o mesa de comedor para fomentar más comunicación
● Intercambio abierto expresando cómo pueden trabajar ambos para evitar el phubbing
● Planear actividades conjuntas
● Silenciar notificaciones
Cierto es que los móviles se han convertido en herramientas esenciales y son una especie de ventana al mundo que nadie quiere perder. Pero conectarse “por cable” a otros teniendo frente a sí al compañero de vida es una mala decisión.
Al elegido no le gusta sentirse ignorado por una adicción. Esto afecta principalmente a las mujeres, ya que según las estadísticas piensan “no quiere estar conmigo”.
Es importante en el amor mantenerse bajo la filosofía de libertad responsable, cuidando tiempo de calidad compartido como práctica constante.
Demostrar respeto y empatía es disfrutar lo más posible el tiempo juntos sin presencias que pudieran resultar perturbadoras.
Así se impiden interferencias que dañan la calidad de vida y se aleja esta nueva patología de nuestra moderna civilización.
La atención ofrecida es buen amor brindado.
Danzar, acariciar, besar, mirar a los ojos, proyectar sueños, reír y gozar nuestros benditos y maravillosos cuerpos cuánto esté a nuestro alcance.
Nos leemos en octubre con más brillantes sensaciones compartidas.
¡Te deseo un septiembre con mucha presencia y brillo!