Te recibo en mi columna para introducirnos en este tema, que cada año ofrece más posibilidades de tratamientos y con muy buenos resultados.
Lo importante es consultar primero a un profesional y saber qué tipo y fototipo de piel tienes, para evaluar la sustancia o sustancias adecuadas para aplicar en tu piel. Posteriormente, observar el estado de la misma y principalmente los hábitos diarios, entre los cuales la aplicación de protección solar es primordial y necesaria.
Hay gran variedad de principios activos con diferentes acciones, concentraciones y PH, de uso médico y cosmetológico, según la característica, incluso se pueden usar en algunos casos en verano.
Hay exclusivos de aplicación en consultorio y otros de uso domiciliario.
PEELING o EXFOLIACIÓN es un tratamiento que se realiza en la piel, injuria controlada para acelerar el proceso de renovación celular, descamación o desprendimiento de células muertas.
El movimiento ascendente de las células hacia la superficie de la epidermis, se va haciendo más lento, comenzando a acentuarse en la década de los 40. Como resultado las capas más superficiales de la piel se van engrosando, alterando su apariencia.
Los EXFOLIANTES pueden ser, FÍSICOS O QUÍMICOS.
FÍSICOS- Eliminan las células muertas mediante la acción mecánica y la fricción de partículas físicas en contacto con nuestra piel, pueden ser con base en cuerpos duros (gránulos de polietileno, sílice, etc. o biodegradables (cáscara de coco, de nuez, bambú o de semillas).
Entre los mecánicos, se destaca cepillo rotatorio, y microdermoabrasión con puntas de diamante. Son técnicas de exfoliación de capas superficiales bien toleradas en pieles sanas. No se debe aplicar en caso de infecciones activas, acné inflamatorio, pacientes tratados con retinoides orales, eczemas, entre otros.
QUIMICOS- Existen dos tipos, 1-ÁCIDOS, ablandan las uniones entre las células para que puedan desprenderse más fácilmente y ayudan a eliminar en forma controlada las capas superficiales de la piel, favoreciendo la regeneración de nuevas células, dejando la piel más uniforme, luminosa y elástica. Mejora las manchas, arrugas, poros dilatados, cicatrices pequeñas de acné, aspecto general de la piel y textura.
Se clasifican según su profundidad en; peeling superficial, medio y profundo. El último llega a dermis media, la vida social puede verse alterada por un lapso breve de tiempo y es de uso estrictamente médico.
Los más conocidos son: ácido glicólico, láctico, mandélico, gluconolactona, ácido lactobiónico, maltobiónico, salicílico, lipohidroxiácido, ácido pirúvico, tricloroacético, azelaico, tranexámico y ácido ferúlico.,
2-PEELING ENZIMÁTICO- Es el más suave que existe. Su principal composición son enzimas extraídas de frutas tropicales como ananá, papaya o mango y hay de calabaza. Actúa sobre la superficie de la piel. Es muy efectivo ablandando comedones y permeabilizando capa córnea, dejándola preparada para la mejor absorción de otros principios activos. Muy bien tolerado en pieles sensibles, ya que son ingredientes naturales.
Por último ácido RETINOICO. Es reconocido como antiedad por excelencia, derivado de la vitamina A. Es más irritante y se debe aplicar solo en las pieles que lo toleren. Otra fórmula es combinado con ácido mandélico, logrando descamación visible que comienza al cabo de 2 0 3 días y la duración del pelado puede extenderse entre 5 y 7. Sus beneficios: piel más clara, luminosa, atenuación de alteraciones pigmentarias, arrugas incipientes, mejora oleosidad, disminución del tamaño de poros dilatados y piel más suave al tacto y fina.
Se deben seguir las indicaciones post- peeling para obtener resultados esperados.
En todos los casos es muy importante la preparación pre-peeling, la piel muy bien hidratada y el hábito de fotoprotección en la mañana y replicar a la tarde.
Es muy importante no depilarse el rostro antes ni después de la sesión.
Hasta el próximo mes!!!
Desde Carmelo-Uruguay
María Inés Daudet Bertani
Cosmetóloga Esteticista
Maestra Ed. Primaria