NO HAGO NADA
Cuando trabajaba en la Escuela infantil, hace ya algunos años, una tarde me llamó la atención una niña de 2 años que estaba sentada en el orinal y miraba lo que pasaba a su alrededor. No se movía, no gritaba ni reía, solamente miraba, solamente estaba. La miré durante unos minutos y me llegó al alma su atención, su centramiento, y no pude resistir la tentación de preguntarle qué hacía… Me miró profundamente, sin moverse, y me dijo: “No Hago Nada”, recalcando las tres palabras sin cambiar su mirada. Y aquella mirada y aquella respuesta me llegó al fondo porque, era cierto, no hacía nada, pero en aquel no hacer nada, lo hacía todo. Toda ella era presencia; sin estar, estaba en todo, era. Le di las gracias internamente, porque me acababa de ofrecer una lección de vida inmensa. Pronto me jubilaría y mi deseo máximo para esta nueva etapa era poder hacer solamente lo que tuviera ganas de hacer y no tener que hacer nada que no sintiera. Yo quería ser como ella.

NO HACER NADA es un regalo, un regalo al que no estamos acostumbrados y que, cuando lo tenemos en las manos, muchas veces no sabemos qué hacer con él, nos viene grande, nos sentimos incómodas, parece que estemos haciendo alguna cosa mal y sentimos la necesidad urgente de llenarlo de alguna cosa. Y es que estar sin hacer nada, es estar con nosotras mismas, es la oportunidad de mirarnos cara a cara a solas y sentirnos, darnos permiso para sentir qué es lo que nos gustaría hacer, qué es lo que nos viene de gusto sin pensar que estamos fallando a nadie… Y no sabemos hacerlo.
No sabemos estar con nosotras mismas porque normalmente siempre tenemos la mirada enfocada hacia fuera, hacia lo que vemos, hacia lo qué nos dicen, hacía lo que piensa la opinión general, hacía lo que tenemos que hacer, hacía lo que debemos pensar y lo que debemos decidir…Y afuera hay mucho ruido, muchas opiniones contradictorias, mucha prisa, muchas maneras de hacer y de pensar, mucho miedo, mucho estrés, mucha incerteza…Y en todo este batiburrillo nos movemos, respiramos, trabajamos e intentamos encontrar nuestro lugar, nuestra parcela que nos identifica para ser escuchados, para ser tenidos en cuenta, para sobresalir del anonimato, para ser alguien, para ser amados, porque en el fondo todos necesitamos sentirnos amados.
Vivimos, de manera inconsciente muchas veces, en la eterna necesidad de hacer y de manifestar que somos; constantemente hemos de estar haciendo alguna cosa porque tenemos una lista muy larga de cosas que tenemos que hacer y que hemos de hacerlas aprisa para poder hacer aún más. Todo va tan deprisa, todo pasa tan rápido que vivimos con la angustia de tener que hacer para no quedar fuera de la carrera. ¿Qué carrera? No lo sé, pero es preciso correr, todo nos impulsa a correr aceleradamente hasta que, un día, quizá la vida o quizá nosotras misma nos paremos y nos demos cuenta que nada de todo esto tiene que ver con quién somos realmente, que toda esta necesidad de correr, de comprar, de tener, de ganar dinero, de destacar, de ser alguien ya no tiene sentido porque está vacío, porque nada de todo esto puede darnos lo que realmente buscamos, que es amor, que es esta paz, esta perfección con la que venimos al nacer…

Y en medio de tanto caos, un oasis: NO HAGO NADA… Paz, serenidad, calma, observación plena, completitud, totalidad, conciencia.
No hacer nada es hacer mucho. Es dejarte sentir, dejarte observar, es dejar que las cosas pasen sin intervenir, sin tener la necesidad de intervenir, sin sentir la necesidad de tener que hacer, de tener que decir, de tener que hacer… Poder vivir lo que tu cuerpo te pida confiando que cada día, a cada momento, la vida te pone delante aquello que llega y que es para ti. Dejar la necesidad constante de ser ese personaje que tu ego te hace creer que eres y centrarte en lo que sientes. Entrenarte a no hacer, a no decir, a escuchar y respirar antes de manifestar aquello tan importante que necesitas decir y que, después de respirar, te das cuenta que tampoco es tan importante…
Tú eres la primera persona a quién debes amar. Tú eres la que te acompaña desde que abriste los ojos a este mundo y la que te acompañará cuando sea tu momento de salir de él. Sé tu mejor amiga, conócete, respétate, ámate, acepta todo lo que sientes, te guste o no, es tu mente la que te hace juzgar y la que te hace creer que tendrías que ser de otra manera. Eres única, no hay otra persona como tú, ni existirá nunca. No dejes que nada altere tu felicidad y paz interior. Continúa viviendo ahora y aquí sin acelerar ni frenar nada. Todo llega cuando tiene que llegar y lo único que necesitas es agradecer y amar cada momento, porque todo cambia.

La sociedad nos confunde mucho y sabe cómo encantarnos y deslumbrarnos, pero no olvidemos nunca la pequeña hada, el pequeño mago que llevamos dentro y que es nuestra luz, única, perfecta, la que no juzga, la que no excluye, la que no exige nada, solo espera, solamente espera que la mires, que la reconozcas, que la escuches, que la veas, que juegues con ella, que rías, que hagas realidad todos tus sueños, que seas valiente porque ella eres tú, tu verdadero ser, de viaje temporal por la Tierra, para aprender a discernir el amor incondicional y eterno entre toda esta fanfarria falsa y escandalosa, vacía y finalmente triste que nos ofrece esta sociedad tan brillante y tan engañosa.
Aprendamos todas y todos a poder decir, de vez en cuando desde el corazón… No Hago Nada… y quedémonos en paz. Gracias, gracias, gracias.
Maria Dolors Beltran Boixadera
mamasocaqui.com
18 comentarios en «NO HAGO NADA»
No fer és una forma de fer. Fer, no fent. Però és un no fer actiu, obert i conscient. És aquell parar-ho tot per deixar que la nostra presència es faci present i pugui traspassar la matèria fins arribar a connectar amb la part espiritual que ens unifica, que ho unifica tot.
Poder portar el no fer al nostre dia a dia de cada dia ens portaria llum i pau: no parlar innecessàriament, no opinar, no caure en la crítica ni en el judici, no tenir pressa en escoltar, no imposar el nostre criteri, no imposar el nostre criteri ni el nostre ego… No fer. Viure des del no fer.
Ernest, d’això eres un mestre: sempre feies alguna cosa: llegies, tocaves el piano, escrivies, inventaves històries amb el Lego, et submergies en la màgia i el misteri… Però sempre des del silenci, la clarividència i la pau del No Fer.
Sí, Abel l’Ernest no necessitava que ningú li alabés, o li valorés res del que feia. Senzillament, creava pel seu gaudi, perquè era la seva manera d’expressar tot el nón que duia dins, perquè era el seu joc, perquè ho estimava tot, perquè el feia feliç. Aquesta és la clau.
T’estimo, Abel.
Una bonica i necessària reflexió.
Com sempre arriba un text que és alò que necessito sentir, en un moment, les vacances, en què s’arremolinen les coses que hauria de fer amb les que voldria fer i acabo descentrant-me del que és: un espai per parar, restaurar i ser.
I mentre anava llegint el meu cos s’ha anat destensant, he anat notant com la musculatura anava cedint i ha estat un bany de realitat que m’ha deixat relaxada i en calma. sóc aquí, a gust, llegint, essent u amb allò que m’expliqueu i reconèixer-ho des de dins..gràcies Dolors i Ernest. Un plaer que vingueu a veure’ns quan ens cal.
Dolors, el que ens fa fer és la por, i quina cosa és més potent per paralitzar-te O no deixar que gaudeixis de ser i prou? La por. I només pot contrarestar la por l’amor… Gràcies Dolors!
M’ha passat igual que a tu, Anna. Els missatges de la Dolors i l’Ernest, arriben just quan els necessito i aquest, just en època de vacances, amb el munt de coses a fer… quan el No Fer Res, és l’única cosa que necessitem.
Gràcies gràcies gràcies
Dolors! M’enxanten tots els teus escrits! Moltes gràcies per compartir i fer que l’Ernest estigui tant present!
Gracies Dolors per compartir amb nosaltres tanta saviesa. Us estimo
Com deia aquell: «La vida és allò que passa mentre tu estàs ocupat en altres històries»
Petons i, sobretot, abraçades!!
Gracias Dolors y Ernest. Gracias por acercarme a la inocencia que guarda l’ós mejores momentos de nuestra existència, en tenerlo todo asi integrados en el sentido sencillo de saber que ante nosotros todo es nuestro, nos pertenece y le pertenecemos.
Gracias siempre por seguir brindándonos tanto amor «sin hacer nada» .
Les llevo en el corazón siempre, asi hago algo con ustedes.
Con amor eterno
Gilbert
Querida mamá Dolors:
Gracias por compartir tanto amor y cogernos de la mano para buscar esa paz interior que tanto anhelamos …
Con esa barita mágica 🧚🏼 que tienes entre tus dedos, nos haces sentir que somos seres de luz y amor!!
Gracias… siempre gracias por hacernos llegar tus maravillosas reflexiones.
Molt ben explicat, cal no només entendre.ho sinó també integrar.ho !!
Gràcies Dolors !!
Quin text tan preciós, Dolors. Ple de certeses profundes i sentiments. Gràcies per compartir-lo amb nosaltres!
Quina reflexió més autentica, Dolors, gràcies per comoartir. Abraçades 🫶🧡🫶
Me recordó una parte de un poema de Eduardo Galeano que dice «¡como canta el pájaro sin saber que canta, y como juega el niño sin saber que juega!»
Gracias por compartir sus experiencias convertidas en sabiduría 😊 ❤️🫶🤗.
Gràcies, Dolors, per compartir, per recordar el que sabem i oblidem, una vegada i una altra. I sempre tornar, a una, a ser, a deixar que el que s’ha de fer es faci, que el que És, sigui. Sempre tornar a mirar el mon desd’un orinal. Una abraçada. Gràcies, gràcies, gràcies.
Gràcies gràcies gràcies, Dolors i Ernest. Sempre ens porteu missatges en el moment just i necessari. Gràcies per irrompre en el frenesí de coses a fer a les vacances i donar-nos la clau a no fer res. Fluir i deixar fer…la vida, ens portarà just el que necessitem a cada moment. 🙏🏻♥️
Dolors!!!! Aquest escrit és meravellós!!!! Tots els teus escrits són meravellosos, però aquest és espectacular!!! No tinc qualificatius que estiguin a l’altura. És el: «No faig res» més ben argumentat i explicat que hagi llegit mai a la meva vida »
Gràcies de tot cor 💓