¿Pop u Ópera?
Con Il Divo, no nos hace falta decidir, porqué lo tenemos todo a la vez, como lo han vuelto a demostrar en este último disco recién sacado del horno «For one in my life: A celebration of motown» rindiendo homenaje a algunos de los mejores temas del histórico sello discográfico Motown Records.
Este cuarteto nació de la mano de Simon Cowell, y todo hay que decirlo, bendita sea la hora que este agente de talentos decidió formar esta agrupación allá por el 2003 y sacando su primer disco con el mismo nombre un año después.
Este cuarteto formado por tres tenores y un barítono, a pesar de que el nombre del grupo es como muy italiano, hay que matizar que ninguno de ellos es ítalo. Carlos Marín, barítono, es español; Urs Bühler, tenor, es suizo; Sébastien Izambard, tenor, es francés y David Miller, tenor, es estadounidense.
En este nuevo disco encontramos canciones como el clásico, legendario y emblemático Ain’t No Mountain High Enough de Marvin Gaye, My Girl, Say you say me o For Once In My Life, dando el nombre a este último álbum, y versionado al género que ellos mejor dominan.
El cuarteto destaca por la mezcla y/o fusión de la ópera con temas de distinto género musical (pop, boleros, música latina, tangos, música sacra…) y es que con estas excepcionales voces que llegan al público de todo el mundo, enamoran a cualquiera y, debemos reconocer que la música romántica no pasará nunca de moda. A todas nos gusta que nos regalen los oídos y si es cantando, mucho mejor.
La verdad es que desde sus inicios ha sido triunfo tras triunfo y es que tal y como dijo Jo Kerrigan, cuando las cuatro voces se convierten en una, convierten la música en… magia.
Personalmente he tenido la fortuna de asistir a dos de sus conciertos programados en Barcelona, en el Palau Sant Jordi, y la verdad es que ha sido todo un espectáculo y no solo por el hecho de poder oírlos en directo, sino que también por la distinguida y cuidada escenografía, la elegancia, el porte, la complicidad que entre ellos se transmiten durante el concierto y por la cercanía con el público.
Os lo recomiendo, dejad que se abra el telón, y que sutilmente vayan apareciendo las siluetas de esas grandes voces tras una sincera sonrisa dedicada para todas nosotras y… que nos enamoren cantando, At least once in life (al menos una vez en la vida).