Qué pasa en el cuerpo cuando meditamos?
“Todo ser humano puede ser, si se lo propone, creador de su propio destino.”
La meditación es una práctica con mucha historia y siglos de antigüedad, sus ejercicios se basan en técnicas de respiración y llevar la atención a tu cuerpo.
Actualmente, sabemos que la meditación ayuda a reducir significativamente el estrés, la ansiedad y las adicciones, además de aumentar la creatividad, el aprendizaje, la atención y la memoria. La mente y el cuerpo están íntimamente relacionados, es decir, si se alteran, por ejemplo, puedes llegar a sentir los síntomas físicos de esa emoción. Por esta razón quiero enseñarte más sobre todos los beneficios que la meditación nos ofrece según la ciencia.
Quienes practican la meditación de forma constante son reconocidos como personas amables y amigables.
¿Y esto a que se debe?
Desde hace unas décadas los científicos han estudiado los efectos de la meditación a nivel cerebral y han descubierto que le pasa a tu cerebro cuando meditas.
Las investigaciones hechas al respecto muestran que el hecho de meditar 10 minutos al día puede reducir significativamente las actividades cerebrales en regiones de tu cerebro que tienen a hacer que tu mente divague.
“Por lo tanto, el simple acto de meditar literalmente está cambiando el tema tipo de patrones predeterminados de tu cerebro.”
La meditación no solo detiene los pensamientos divagantes, sino que también construye más conexiones entre las distintas partes del cuerpo, aumentando la materia gris en la zona prefrontal, zona del cerebro relacionada con el aprendizaje, empatía, memoria; así como la reducción de la amígdala cerebral el área relacionada con el estrés y ansiedad. Es fascínate ver la plasticidad del cerebro y cómo, mediante la práctica, podemos jugar el papel activo en el cambio a nivel cerebral, mejorando la calidad de vida.
Ahora que sabemos todos los beneficios que nos aporta la meditación, nos estaremos preguntando
¿Cómo comienzo a meditar?
Cómo todo nuevo hábito, lo primero que tienes que hacer es, introducir la meditación a tu día a día, lo ideal es reservar tiempo para realizar esta actividad. No te preocupes si un día te saltaste la meditación, pero procura ser lo más constante posible hasta hacerlo parte de tu rutina. Si nos ponemos demasiada presión o nos “obligamos” sin que nos apetezca, lo más probable es que no nos salga bien, lo importante es que seas consciente de cuáles son los pensamientos y emociones recurrentes que no te “dejan” meditar.
¿Qué necesitas para comenzar?
*Elige un lugar para meditar Preferiblemente que sea un lugar silencioso, evita las distracciones como la tv, móvil, etc.
*Elige tu momento favorito También es recomendable saber cuál es tu mejor momento para hacerlo, recuerda que una forma muy fácil de crear un nuevo hábito es hacerlo todos los días a la misma hora, si es posible!
*Usa ropa cómoda Esto te ayudará a permanecer más tiempo sentado o acostado en una sola posición.
¡Es importante saber que si estás comenzando será suficiente con unos 10 a 15 minutos llevando la atención a la respiración, sentir cómo entra y sale el aire de tu cuerpo con cada respiración, y si tienes pensamientos recurrentes, No pasa nada! Esa es la naturaleza de la mente y es Justo eso lo que nos enseña la meditación, observarnos a nosotros mismos sin juicios, se trata de que vayas descubriendo con mucho amor propio todo lo que vaya saliendo durante la práctica.
Pero que sin duda vale totalmente la pena.