Una historia de redención.
Me arrepiento de tantas cosas en mi vida, que he decidido cambiar. Esta es una frase que le dice el narco “Manitas del Monte”, una excelsa Karla Sofía Gascón, a la sobrecualificada e infravalorada abogada Rita, una monumental Zoe Saldana, para que haga realidad su sueño de cambiar de sexo y hacer desaparecer para siempre a cambio de convertirse en mujer. Para convertirse en Emilia Pérez.
El nombre de esa nueva mujer, es el título de la película que os quiero recomendar esta semana.. Emilia Pérez ganó dos de los tres premios a los que optaba en el pasado festival de cine de Cannes y que también pasó por el festival de cine de San Sebastián. Ha ganado también el mejor montaje en los premios del cine Europeo.
El director francés Jacques Audiard, realiza un narcomusical “queer”, que derrocha electricidad y osadía, donde su trio de intérpretes completado por Selena Gómez, sirven de pilares para esta historia de redención.
La película es un coctel o mezcla de muchas cosas, a veces disparatada pero efectiva en este thriller, que a veces derrocha telenovela, otras veces drama y otras veces humor, en este musical desbordante y magnifico.
El viaje liberador que propone su director en Emilia Pérez, es puro músculo visual en una epopeya estética con una variedad de recursos técnicos y de montaje sobresaliente.
La metáfora de Emilia Pérez, que cuando es “Manitas” es una persona horrenda y triste aprisionada en un cuerpo que no reconoce, es el de un país anegado que necesita renacer de sus cenizas, México, en forma de denuncia de la corrupción de un Estado.
Sus 130 minutos pasa en un tris tras, ya que los números musicales son brutales, que te hacen bailar y cantar.
He nombrado tres actrices, Karla Sofía Gascón, en el papel del narco Manitas del Monte. Zoe Saldana en el de Rita, la abogada. Selena Gómez en Jessi, la mujer del narco “Manitas”, pero hay una aparición estelar a mitad de película, que como indica su nombre “Epifanía”, que interpreta Adriana Paz, da un toque de luz a una película que parece oscura, pero que desprende mucha luz.
Lógicamente el film no es sencillo, ni recomendable a todo tipo de público, que puede desagradar a mucha gente, que no ha gustado en México porque no deja bien a su país, pero que es una joya visual, magnifica.
Emilia Pérez estará en la carrera de los Oscar por Francia en mejor película de habla no inglesa. Espero que entre, al menos, entre las finalistas.