¿NECESITANDO UN DETOX?
Qué hacer y que NO hacer para ver resultados (y sin sufrir).
Primavera es época de renovarnos y nada mejor que hacer un poquito de “spring cleaning” a tu alimentación. El detox es la herramienta perfecta porque vas a enfocarte en lo natural, en superalimentos, con más propiedades nutricionales que lo que venís comiendo siempre y, cuando lo haces bien, eso tiene beneficios maravillosos para tu piel, tu digestión, tu energía y sí: tu figura – sea que necesitas bajar el último par de kilitos, unos cuantos, o quieres deshincharte.
No temas, no tienes por qué vivir a líquidos ni hacer sacrificios enormes para ver los mejores resultados del detox.
Lo importante es elegir una línea balanceada y completa, que cuide, que estés incluyendo todos los grupos de alimentos, un buen aporte proteico y de nutrientes, que mantenga un índice glucémico bajo y fomente la alcalinidad.
Tu cuerpo se desintoxica naturalmente, pero necesita tu ayuda, dándole la alimentación adecuada para funcionar de manera óptima.
Un detox es un mimo para tu cuerpo, sea que lo hagas por unos días o se vuelva la base de tu rutina de cuidados. Te contamos qué hacer, cuánto tiempo, qué intensidad elegir según tus objetivos y cómo empezar.
Hay dos formas de encarar un detox:
Un BOOST o RESET Cuando venís de una época de estrés, de comer cualquier cosa o simplemente sentís que necesitas un cambio intenso.
El objetivo de un boost es darte lo mejor de lo mejor por unos días, sabiendo que luego vas a volver a tu rutina sintiéndote renovada.
Cuando hacer un reset:
• Eres de comer bien, pero últimamente estás alejada de tus hábitos saludables.
• Te estancaste en la dieta. Venías bárbaro con tus nuevos hábitos y viendo resultados, pero sentís que estás en una meseta.
• Estuviste enferma o te sentís muy baja de energía y tu cuerpo necesita mimos extra.
Cuánto tiempo es necesario: Un reset puede ser de unos días o unas semanas. La característica es que es un tiempo acotado en que te decidiste a comer mejor con un objetivo en mente.
Después de tu detox por supuesto te recomendamos mantener los detalles del detox que mejor te hayan hecho sentir o volver a lo mejor de tu rutina.
Lo más lindo de un boost detox es que nos recuerda lo maravilloso que es nuestro cuerpo, cómo responde ante los cuidados que le damos y lo bien que nos podemos sentir con pequeños cambios.
Nos gusta recomendarte entre 7 y 21 días.
Qué tan intenso: La intensidad la pones tú según tus objetivos y lo que te es posible.
Puedes hacer un detox en que solo integras el jugo verde diario y seguís tu día normal, o puedes hacer un detox que te cubra las cuatro comidas, snacks y líquidos del día. OJO con pensar que el detox solo sirve cuando es full, porque no es así. Uno de los grandes errores que nos parte el alma ver es cuando alguien con todas las buenas intenciones del mundo dice:
“lo hago después cuando tenga tiempo/dinero/energía/etc. para hacerlo perfecto”.
Créeme, ese momento no llega porque siempre vas a tener nuevos desafíos y eres una persona con miles de proyectos, una familia y amigos que te quieren y te requieren.
Hazte el tiempo para empezar tu detox ahora – y acuérdate, no tienes por qué hacerlo perfecto o full, solo tienes que empezar.
Cada cuánto: Cuando elegís un detox balanceado y completo como el nuestro, puedes hacerlo cuando quieras y cuántas veces quieras.
Muchas chicas nos piden un pack pronto una vez por mes, o hacen 21 días intensos varias veces al año.
También con nuestros cursos online cortos como el “Plan 7 Días” muchas chicas nos cuentan que lo repiten al menos una vez por temporada como una puesta a punto.
B) Un CAMBIO DE HÁBITOS SALUDABLE Esta línea de alimentación — cuando es un detox como el nuestro, balanceado y completo – es maravillosa de base para tu día a día.
No temas, no necesitas hacer días de líquidos, ni vivir a ensalada y de hecho un detox puede ser flexible y sumándose gradualmente porque cuando elegís cambiar de hábitos de verdad, estás apuntando a un cambio real y sostenible en el tiempo.
Sip, uno de esos cambios para ver resultados hoy y para seguir haciendo bien toda la vida.
Cuando hacer un cambio de hábitos:
• ¿Eres de comer bien, pero sentís que quieres ir a otro nivel?
• Te das cuenta de que quieres que tu familia coma mejor y todo nace con tu cambio interno y tu ejemplo en la diaria.
• Tienes un tema de salud y el médico te sugirió revisar tu alimentación.
• ¿Quieres bajar de peso de una vez y para siempre?
Si vivís a dieta y estás harta, si quieres olvidarte del drama de la comida, saber cómo darle lo mejor a tu cuerpo y dejar las dietas atrás, lo mejor siempre va a ser apuntar a un cambio de hábitos saludable y sostenible.
• Tienes un objetivo grande como:
tener más energía, estar al 100% para tu familia o ese sueño que te acompaña desde que sos chiquita y requiere todo de vos.
• ¿Estás lista para ser tu mejor versión?
• Recién volviste de un viaje con unos kilitos de más y quieres deshincharte y encontrarle la vuelta a cómo volver a tu rutina saludable.
Cuánto tiempo es necesario:
Cuando apuntamos a hacer un cambio de hábitos real no hay límite de tiempo y es importante acordarnos de esto.
El cambio real está lleno de inicios, con mucho entusiasmo, desvíos por el camino y vuelta a empezar.
Hay dos partes clave:
hay que empezar y hay que #volveraempezar
Es totalmente normal si te vas un poco por el camino; tienes años de hábitos que van totalmente en contra de lo que estás tratando de lograr ahora, pero con constancia todo es posible.
Tente paciencia, tente cariño y trátate como tratarías a tu mejor amiga (nada de darte palo cuando te olvidas del detox y caes en esa torta de chocolate suculenta;).
Estás apuntando a un cambio que se quede contigo, por eso es fundamental ponerte objetivos sostenibles y que disfrutes el proceso.
Siempre que empieces algo nuevo, el comienzo va a estar lleno de muchas ganas y motivación, pero también de la parte más difícil de conocer un mundo nuevo – nuevos alimentos, nuevos sabores, nuevas formas de preparación, nueva info y hasta nuevas rutinas de dónde ir a hacer las compras o dónde preferís salir a comer.
Tod@s somos diferentes y cuando empezamos un cambio de hábitos real para algun@s es mejor arrancar a full y con unas semanas de inmersión total superexigentes y al pie de la letra, pero para la mayoría la flexibilidad es el mejor camino.
Sea que empieces a full o gradual (por ejemplo, empezar solo con los desayunos saludables), es superútil ponerte un marco de tiempo en que vas a comprometerte al cambio.
Un buen marco de tiempo es 21 a 30 días, porque es el tiempo en que se forman nuevos hábitos.
Qué tan intenso: La alimentación saludable es una herramienta para tu vida, te permite ser tu mejor versión no solo en lo divina que te ves la figura, sino en tu energía, tu bienestar y hasta el buen humor. Dar lo mejor para tus sueños, tu familia, tus proyectos empieza por darle lo mejor a tu cuerpo.
Por supuesto, cuando tenemos un gran objetivo o queremos acelerar un poquito, el proceso, cuanta más constancia tengamos, va a ser mejor.
¡Pero al comienzo, darnos flexibilidad para empezar a nuestro ritmo tiende a ser la mejor estrategia para dejarnos tener esos wins iniciales que nos dan confianza y nos muestran que podemos!
Creemos muchísimo en que comemos para vivir, no se trata de vivir para comer.
OJO con esto porque muchas veces el gran error en el que caemos es justamente tratar de hacer todo “perfecto” o pensar que si no hacemos las cuatro comidas detox no funciona, y realmente no es así. Busca la intensidad que funcione para ti hoy, sea empezar con solo el jugo verde o empezar con las cuatro comidas, sea empezar con mucha variedad o con 5 recetas.
Lo más importante es que estás decidida y empezaste TU cambio. #vospodés
Ambas formas de hacer un detox están per-fec-tas.
De hecho, muchas veces hacer un BOOST inicial es lo que estamos necesitando para enamorarnos de la alimentación saludable y darnos cuenta de que queremos un CAMBIO DE HÁBITOS real.
A veces, hoy no es el momento de empezar un cambio o nos parece una meta enorme, pero sí estamos con ganas de hacer ese boost (¡y nos damos cuenta de que nuestro cuerpo lo pide!). ¡Aprovechalo!
A veces simplemente con este boost llegamos a nuestro objetivo y ya sabemos cómo mantener lo mejor de nuestra rutina que ya teníamos de antes y con eso fue supersuficiente. *Woohoo* ¡Elegí lo que va mejor contigo y empieza! Un día detox clásico puede tener infinitas combinaciones, pero como ejemplo básate en este menú:
AYUNAS – Un Jugo Verde o un Vaso de Agua con Limón y Vinagre de Manzana.
DESAYUNO – Una Chía Pudding de Acaí o Tostadas con Palta y Huevo a la plancha, acompañado de un Té verde.
ALMUERZO – Quinoa con semillas, Verdes, Frescos y un filette de Pollo o pescado.
SNACK – 15 almendras o palitos de apio y zanahoria.
MERIENDA – Smoothie de Maca.
CENA – Sopa de Calabaza y Champignones.
INFO TANVERDE Artículo por la Lic. En nutrición Maren Torheim (TanVerde) Autora del libro “Como comer sano para adelgazar”
Maren trabaja desde hace más de 30 años en policlínica y piso en uno de los sanatorios más importantes del país.
Se formó en Uruguay y también en el extranjero, profundizando en la dieta cetogénica para el control de epilepsia. Siempre ha priorizado el trabajo en equipo, trabajando desde hace más de dos décadas en un equipo interdisciplinario con un cardiólogo y psicólogas para el cambio de hábitos, y con neurólogos y neuropediatras en la dieta cetogénica.
Más recientemente, Maren se dedica a un emprendimiento familiar de alimentación detox y saludable, ofreciendo cursos online con coaching nutricional en TanVerde.