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La responsabilidad radical es la clave para la curación 

Quiero que cierres los ojos. 

Si pudieras transformar tu salud… 

● ¿Qué síntomas le gustaría poder resolver? 

● ¿Cómo te gustaría sentirte a diario? 

● ¿Qué crees que te está frenando? 

¿Qué te salió con la última pregunta? 

¿POR QUÉ piensas que no puedes sanar? 

Independientemente de lo que surja, a menudo el antídoto es asumir una responsabilidad radical por el resultado que desea… Siempre habrá una excusa disponible que usarás para evitar alcanzar tus metas. 

Reflexiona sobre lo que te dices a ti misma y por qué no estás tomando medidas para lograr lo que quieres. 

Aborda tus síntomas antes de que te griten. 

Día tras día, veo personas que invierten en artículos que no mejoran su salud… y luego me dicen que no tienen los recursos (o el tiempo) para cambiar su estilo de vida. 

Si bien esta es una verdad triste (y tal vez dura), simplemente significa que tu salud (en este momento) no es una prioridad. 

Y cuando tus síntomas finalmente griten tan fuerte que ya no puedas ignorarlos, se verán obligados a dedicar tiempo a su salud. 

Pero ¿y si no tienes tiempo ahora mismo para recuperarte? 

Si esto suena como un hábito tuyo, prueba una idea simple. 

Cambia tu discurso interno. Cambiar el discurso nos recuerda que el tiempo es una elección. Cuando usas el tiempo como excusa, puede ser porque el tiempo proporciona una respuesta cortés cuando la verdad a menudo puede ser difícil de escuchar. 

En lugar de decir: 

No puedo ir al gimnasio en este momento porque no tengo tiempo. 

Prueba esto: 

No puedo ir al gimnasio en este momento porque mi salud no es una prioridad. 

En lugar de decir: 

No tengo tiempo para preparar comidas nutritivas:

Prueba esto: 

No puedo preparar comidas porque tengo otras prioridades, como navegar por las redes sociales. 

En lugar de decir: 

No tengo suficientes horas en un día para dormir lo suficiente. 

Prueba esto: 

No duermo lo suficiente porque priorizo el tiempo frente a la televisión. 

Gran diferencia, ¿NO? 

Si este cambio de lenguaje te hace sentir incómoda, es posible que hayas estado utilizando tu tiempo como excusa. 

Cambiar nuestro lenguaje nos recuerda que el tiempo es una elección y que sanar es una responsabilidad personal. 

Sí, tu viaje de sanación personal es un trabajo duro. 

Será incómodo y desafiante a veces, ¡y se necesitará coraje para superarlo! 

El paso más importante para activar ese coraje, profundizar y promoverlo al siguiente nivel, es mirar dentro de ti misma, asumir la responsabilidad y comenzar a sanar tu cuerpo. 

¿Estás asumiendo la responsabilidad o aceptando las condiciones de tu salud? 

Asumir una responsabilidad personal radical es crucial para vivir tu propia versión del éxito… ¡Incluyendo ser la versión más saludable de TI! Asumir la responsabilidad no significa culparse o avergonzarse. Significa aceptar que la forma en que vivimos puede estar contribuyendo a nuestros problemas de salud y darnos cuenta de que es necesario hacer cambios. 

Al final del día, tu éxito depende de ti, así que levántate y toma el control de tu vida, y tu salud. 

No aceptes dónde te encuentra si no estás sana o feliz. 

Las personas que toman el control de su propia salud física, mental y espiritual tienden a vivir más tiempo. 

La verdadera sanación ocurre dentro de ti cuando tomas el 100% de la responsabilidad de tu vida y tus ACCIONES. 

Tu cuerpo puede curarse a sí mismo siempre y cuando le demos lo que necesita para hacer su trabajo. 

Como profesional de la salud, mi función es guiarte y aconsejarte sobre el mejor curso de acción para ayudarte a resolver síntomas. 

Puedo… 

● Brindarte recomendaciones personalizadas de suplementos en función de tu historial de salud y tus objetivos. 

● Compartir contigo el mejor tipo de ejercicio para ti y tu cuerpo. 

● Proporcionarte una lista de los alimentos que debes incluir y evitar que acelerarán tu curación. 

● Sugerir varias prácticas para aliviar el estrés para que las pruebes, y veas cuál es la mejor para ti. 

● Compartir consejos y trucos para ayudarte a obtener una mejor calidad/cantidad de sueño. 

Pero… 

No puedo implementar el plan de acción por ti. 

● No puedo tomar suplementos por ti. 

● No puedo despertarme una hora antes y hacer ejercicio por ti. 

● No puedo reservar tiempo para prepararte alimentos saludables y curativos. 

● No puedo meditar cuando los tiempos se vuelven estresantes para ti. 

● No puedo acostarme a una hora razonable para ti. 

Soy tu guía durante tu viaje de salud, puedes contar conmigo para: 

● Establecer tus metas de salud 

● Llegar a la causa raíz de tus síntomas 

● Usar tecnología de punta para probar todo lo posible. 

Y apoyarte en cada paso del camino. 

Pero al final del día, ¡tú eres la que necesita hacer el trabajo! 

¡No hay otra forma de evitarlo! 

¡Antes de trabajar con cualquier tipo de experto en salud, debes saber que tú eres la responsable del éxito de su tratamiento! 

A pesar de que el viaje es en última instancia tuya para caminar, no tienes que hacerlo solo. 

Encuentra a una persona que te apoye en todos los altibajos de tu autodescubrimiento. 

Ir por el camino de lo desconocido, es la única forma en que podemos sanar nosotras mismas.

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