TU DIETA NO ES, ¡SOLO LO QUE COMES!
Es lo que ves, lo que escuchas, lo que lees, la gente con la que te rodeas. Ten en cuenta las cosas que pones en tu cuerpo físico, cuerpo emocional y cuerpo espiritual.
¡Hola! Hoy quiero comenzar este artículo de una manera un tanto peculiar y especial, quiero agradecer a BRILLANTES SENSACIONES LA REVISTA, por abrirme las puertas de la revista e invitarme a formar parte de esta gran familia, es increíble lo rápido que se me ha pasado el tiempo, pueden creer en este mes de julio hace 1 año se lanzó el primer número de la revista, solo puedo decir felicidades por el éxito y es por eso que les traigo este maravilloso tema que siento que muy relacionado con vuestra intención y misión como empresa.
TU DIETA NO ES, ¡SOLO LO QUE COMES!
Si es verdad que muchas veces, al escuchar la palabra dieta, nuestro cerebro reacciona como privación, el hecho de no poder consumir más. Sin embargo, lo que realmente significa es la adecuada alimentación.
Y que mejor que la alimentación mental, el darnos cuenta de que es lo que le estamos metiendo a nuestro cerebro a través de la televisión, la radio y el internet, los teléfonos móviles con las redes sociales, todo esto va alimentándote interiormente y haciéndote ser quién eres.
Tu mente se alimenta con lo que miras, lees y escuchas a diario, así que debes tomar en cuenta tu salud mental, así como importa lo externo y estético, de igual forma debemos de ser conscientes de que es lo que le damos a nuestro cuerpo físico, emocional y espiritual, todo influye de manera positiva o negativa generando un mensaje el cual de forma inconsciente lo estamos alojando en nuestros ideales y creencias.
Y es por eso por lo que quiero preguntarte
¿Eres feliz y positivo?
¿Te sientes cargado, irritable y pesimista?
¿Estás preocupado o agradecido?
Cada segundo, la información que te llega desde dentro y desde fuera va moldeándote; pero,
¿Eres consciente de la calidad de esa información?
Cada día accedemos a grandes cantidades de información, tanto de forma voluntaria como involuntaria.
Los programas que escogemos ver en la televisión, la música que escuchamos, los libros que leemos…
¿Qué tipo de emociones te produce?
¿Qué palabras utilizan?
Antes de escogerla, imagina que tu mente es como un ordenador que se va a programar con aquello que reciba.
Al tomarte ese momento te das cuenta de que, tienes la posibilidad de programarte para la felicidad, el amor, la diversión y la gratitud, y no para la injusticia, las desgracias y el aspecto más oscuro de la vida.
Recuerda que esa información seguirá funcionando en tu interior una vez que cierres el libro, apagues la radio o el televisor. De igual forma somos la suma de las cinco personas con quienes más nos relacionamos habitualmente. Precisamente por esto es importante rodearnos de seres humanos que nos inspiren, nos motiven, nos aprecien y nos respeten.
Si deseas convertirte en una persona amable, responsable, feliz o positiva, escoge compañías que te aporten aquello que tú mismo deseas reflejar.
Nada drena tanto nuestra energía como las personas manipuladoras y negativas. Vive nutriendo tu mente de forma consciente. Por lo general, caminamos por la vida en piloto automático y sin prestar demasiada atención a los aspectos anteriormente mencionados.
Por ello es necesario hacer un esfuerzo consciente para empezar a escoger, de forma deliberada, aquello que queremos permitir en nuestra vida.
Presta atención a quienes te rodean, a las actividades que realizas a diario, a los pensamientos que sueles mantener.
¿Constituyen un alimento mental, nutritivo, saludable y enriquecedor? ¿Contribuyen a formar la persona que deseas ser y el entorno del que deseas formar parte?
En gran medida, una mente sana, un estado anímico positivo y una vida satisfactoria dependen de estas pequeñas elecciones que realizamos a diario, no renuncies a tu poder.