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En La Acera De En Frente Cuando la química es más que feromonas, Chemsex parte 2

En La Acera De En Frente Cuando la química es más que feromonas, Chemsex parte 2

Noviembre con aires de diciembre. No se qué pasa en esta sociedad de consumo que octubre no ha terminado y ya ves a todo el mundo disfrazado, que no vestido de Navidad, en una dinámica social que no tiene absolutamente nada que ver con la tradición y valores que un posicionamiento filosófico religioso quiso dar como dogma. O simplemente se ha caído la máscara de esta “tradición”, mostrando que su objetivo era el capitalismo. Una discusión que en este articulo no entraré en detalles pero quizá plantearlo no esté lejos.

Vamos a las efemérides de noviembre y al preludio en la ultima semana de este mes que se prepara para el 1 de diciembre:

Primer sábado de noviembre: Marcha del Orgullo LGTBIQ+ en Buenos Aires, Argentina

8 de noviembre: Día de la Solidaridad Intersexual

18 de noviembre: Día de las personas LGBTIQ+ en las Ciencias (LGBTIQ+ STEM DAY)

20 de noviembre: Día de la Memoria Trans

25 de noviembre: Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer

1 de diciembre: Día Mundial de la Lucha contra el VIH/SIDA

El chemsex , tema del cual ya he hablado hace unos cuantos episodios (Episodio 6, abril 2022), lo he vuelto a poner de protagonista de estos artículos ya que pasa el tiempo y la tasa de incidencia no baja si no todo lo contrario, ha subido (claramente este no es un tema que solo abarque al colectivo LGTBIQ+, pero sí bastante relevante).

En el libro de Enrique Rojas “El hombre light” vemos en forma de ensayo filosófico una crítica al hombre (al ser humano) actual como ser hedonista y materialista cuya única meta en la vida es alcanzar el éxito. Mientras Hilario Blasco Fontesilla en “El impacto de las redes sociales y en la sociedad: redes sociales, redil social, ¿O telaraña?” nos habla que estas tienen dos funciones muy claras: facilitar la comunicación y el intercambio de información y hacer favorecer la creación de comunidades. No obstante, este fenómeno puede entenderse como una consecuencia de vivir una sociedad sintiéndose vací@, profundamente infeliz a pesar de la amplia oferta de felicidad basada en el consumo.

Cuando la monotonía y la sobredemanda de experiencias personales saturan el mercado, la búsqueda del quiebre del aburrimiento nos lleva a un nuevo extremo en este juego donde el orgasmo ya no es el límite. Cuanto más, mejor.

                                                           ¿Con quién o quienes?

Eso ya no es lo relevante, sino el número, horas, etc. Claramente la capacidad física de periodo refractario es un límite el cual dejar atrás y Alicia -en ese momento- entra al otro lado del espejo y, junto a ella, todo un universo de complementos químicos. En este mundo de fantasía la percepción superficial del estoy y el soy se abandonan al deseo.

“El sexo que se practica no es moralmente correcto, dulcificamos con nombres para hacerlo aceptable”

Nuevas experiencias y nuevos límites, pero también un nuevo consumo para ser parte de una comunidad en la cual el éxito se mide en lo lejano que dejaste las fronteras de la capacidad física, además de incrementar el límite de lo que podría ser “lo tradicional”.

“Toda una jerga para dar un nuevo lenguaje a una comunidad: V, T, G, M,K”*

La necesidad intrínseca de ser socialmente aceptados como la interpretación de una obra de arte nos han llevado a negar el paso físico del tiempo y crear una máscara. Vivir en un vampirismo extremo, donde los fluidos se combinan en cócteles químicos para tener la eterna gracia pagando un coste muy alto. En más de un caso el coste es la propia vida o, a largo plazo, la calidad de ésta. Dicha vida solo te permite salir a oscuras de caza, con tus colmillos preparados en las redes sociales, donde ser la presa o el cazador muchas veces no importa. Solo el juego de alcanzar un poco de ese elixir y dejar la realidad aparcada para complacer a esa fantasía que te aleje del supuesto eterno aburrimiento y tristeza.

“Sexo y Drogas, pasaron de ser cosas separadas y hoy no puedo sin ellas juntas”. Anónimo

¿En este sentido cuanto estás pendiente y eres consciente del yo y del otro?

El profundo éxtasis provoca la pérdida del yo, ya que no ha sido capaz de notar que el que estaba a su lado ha dejado de respirar, o está sufriendo convulsiones. Que no es que le ha entrado sueño, ha sido un paro cardiorrespiratorio del cual no se ha sido consciente o que quizás se está viviendo y no se llega a tener claro como pedir ayuda y se queda ahí tirad@.

Y después, por las mismas redes sociales en las que iniciaste un escaparate de Neverland, lamentas con frases y hashtags tu luto, que también es parte de una performance social.

¿Esto es todo?

La soledad no es el problema de una sociedad hiperconectada a una virtualidad como forma de comunidad. Es el individualismo, hedonismo y consumismo los que no han ocasionado no saber apreciar la vida como algo que contiene periodos de latencia, descanso y no es un constante clímax. Disfrutar teniendo el descanso necesario no haciendo nada, muchas veces es la mejor fuente para poder disfrutar de los pequeños, medianos y grandes momentos de la vida. Aunque dé la impresión que si no estás en en la cresta de la ola ya no existes.

“Las personas que han crecido sintiéndose aislad@s, buscan un desinhibidor”.

“Chemsex” documental por William Fairman / Max Gogarty.

Las experiencias en este sentido tenemos que analizarlas a nivel personal y con profesionales psicosanitarios, con especialización en la materia. A los que no somos especialistas especulares y hacer juicios del tema no nos corresponde. Quizás si nos informarnos y vemos dentro de nuestra capacidad podremos dar un soporte emocional claro, teniendo en cuenta que ninguna persona está libre caer en algún tipo de adición en cualquier momento.

“Después de tanta soledad eres parte de un grupo social”

La pertenencia a un grupo social es un factor importante en el desarrollo de la salud psicológica de tod@s, y la búsqueda de espacios abiertos donde encontrar similares sin miedo al estigma o discriminación son escenarios esenciales. Desde esa necesidad se han ido haciendo demandas sociales por la igualdad, tanto en el marco jurídicos como en el social. La sociedad avanza, no únicamente por lo impuesto en leyes también por nuestra responsabilidad en la manera de actuar.

Como también en el lenguaje que se tiene a escalas socioeconómicas: Si eres de una clase económica privilegiada y te drogas para la sociedad actual eres adict@ a las sustancias, pero si por el contrario eres pobre, LGTBIQ+ o inmigrante, eres un/a/e yonki.

“Con chem tengo la confianza y me siento una porno star”

¿El usuario de Chemsex que busca?

Existen tantas respuestas para esta pregunta como diversidad de usuarios. El tema de fondo no es el qué se busca, sino el porqué y lo satisface (o no) con sustancias (drogas). Es este el trasfondo, uno en el que tras esa búsqueda de experiencias, felicidades efímeras, cuando el efecto se pasa se encuentra delante del espejo ante la soledad con el eco de un grito sordo. Y la única canción irónicamente que retumba en el cerebro es “hoy no me puedo levantar”.

¿Porque estoy destruido?

¿Que pasa con la muerte de un usuari@ de chemsex?

Que el eco del estigma cae sobre los demás y muchos esperan que sea el castigo divino como consecuencia de su “estilo de vida” (como lo ha sido para las víctimas del VIH/SIDA). Parafraseando al general Millán Astray: “¡Muera la inteligencia! Y ¡Viva la muerte!”.

La ignorancia se ha tomado la licencia de señalar con el dedo, y de allí ha generado un silencio de quienes han entrado a este laberinto que sí tiene salida. Pero el “a mí no me pasará” queda resuelto cuando te enteras de quién se ha ido, tan ajeno como ver en los informativos la cantidad de personas fallecidas en los conflictos bélicos actuales y que, colgando una banderita, te hacen olvidar y te quedas con la sensación de estar en el bando correcto. Lo mismo que enviando un like y compartiendo en RRSS #noteolvidamos.

“El estigma y el trauma generan diferentes respuestas, reacciones y creencias”

Vivimos en una cultura basada en excesos. Aunque eso sea lo único que la gente ve, en realidad la mayoría no es así. Solamente se requiere un poco de empatía, un abrazo honesto y una mirada que te diga: “Cuenta conmigo, aquí estoy, Te quiero.”

No dejemos a nuestros menores en custodia con un televisor, móvil, tablet, etc. Enseñémosles que aburrirse no es frustrante, sino motivante, para la creatividad. No olvidemos saludar a la otra persona que nos encontramos a diario, ¡es gratuito! Construyamos sociedad, no sabemos cuanto y cuando necesitaremos esa mano anónima, no prejuzguemos a nadie y preocupémonos de quienes somos individualmente. La opinión del resto no la podemos cambiar, pero la nuestra propia SÍ.

“Lo que piensen el resto de mí no es asunto mío”

Si necesitas ayuda o conoces a alguien que pueda necesitarla, en el primer capitulo dejo lugares y ONG’s que pueden dar un soporte, (https://brillantessensaciones.net/4451-2/ ) Si te resulta más cómodo contacta conmigo, el autor. La interacción, comentarios y debates de este articulo también sirven para la retroalimentación de información. Gracias.

PD: Con Amor

Miquel Claudì-López

@miquelclaudilopez

@enlaaceradeenfrente

*V, Viagra

T, Tina

G, GHB/GBL

M, Metadrona

K, Ketamina

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3 comentarios en «En La Acera De En Frente Cuando la química es más que feromonas, Chemsex parte 2»

  1. Muy Interesante, todo el trabajo que has hecho Miguel Enhorabuena
    Un Saludo, más conciencia con estos temas que son Muy importantes en el colectivo LGTBI

    Responder

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